Las voces en defensa de El Cerrito siguen exigiendo justicia por el daño ambiental en Quezaltepeque
Por: Iván Escobar
Pobladores de las comunidades aledañas a El Cerrito del municipio de Quezaltepeque, La Libertad contiuaron este martes 25 de julio, alzando su voz ante el daño ambiental que generan empresas extractivistas y que ponen en riesgo la vida y ecosistemas de la zona.
Las comunidades acompañadas de Nayarit Mujeres y Juventudes, Mujeres Ambientalistas de El Salvador (AMAES), y representantes de la Federación de Pueblos Originarios del Sur exigieron frenar la explotación que sufre desde hace años El Cerrito.
Desde hace tiempos se viene denunciando la afectación ambiental, ningún gobierno ha retomado el llamado, por ello, reiteran a las autoridades actuales, el apoyo para que no siga la explotación de la zona por las empresas SALTEX, de la Roca, Prefasa, Precasa, MEGABLOCK entre otras que mantienen su constante explotación, también se ha denunciado la presencia de volquetas extrayendo material rocoso, con distintivos del ministerio de Obras Públicas, lo que mantiene preocupados a los poblaciones.
A finales de mayo de este año, se llevó a cabo una inspección por parte de la jueza del juzgado ambiental de Santa Tecla, quien pudo evidenciar la destrucción severa del lugar, y afectación a todo el ecosistema.
«Se está poniendo primero lo material sobre la vida, y la vida es primero», expresó Victoria Chávez, lideresa de la comunidad, en referencia a que nadie quiere asumir su responsabilidad ante lo que denomina «ecofeminicidio».
Y advirtió que la misma naturaleza castigará por los daños generados a la madre tierra, «(los responsables) tienen nombre y apellido, aunque digan que esto es privado, es mentira, está es la Casa Común, la casa de todos…la madre tierra», afirmó.
Tras hacer un nuevo recorrido con periodistas y pobladores se ha evidenciado hoy que las máquinas siguen extrayendo el material pétreo, llevándose de encuentro lo poco que queda de fauna y flora, dejando sin mantos acuíferos a las comunidades, lamentaron loa afectados.
Un lugar sagrado
La Federación de Pueblos Originarios del Sur consagró a inicios de julio del presente año, El Cerrito como un lugar sagrado para las comunidades originarias, en mandato de la enseñanza ancestral que dejó como herencia la preservación y cuido de los recursos naturales, sobre todo aquellos que provean vida a sus pobladores.
Este día, se continuó con el proceso, y se celebró una ceremonia para consagrar un segundo altar, la idea es contar con cuatro altares en El Cerrito, correspondientes a los cuatro elementos de la vida: Fuego, Tierra, Aire y Agua, trabajo que busca dar cumplimiento a los mandatos ancestrales, «escuchando lo que nuestras abuelas y abuelos han expresado a través del fuego sagrado en nuestros altares, que es el llamado firme a salvar la tierra, el agua, nuestros recursos «, detalló Manuel Fernández, representante de la Federación de Pueblos Originarios del Sur.