Archivo | septiembre, 2019

Armijo, el poeta salvadoreño que nunca olvidó su tierra

29 Sep

 

Foto tomada de internet.

Por: Iván Escobar

Desde pequeño quiso ser poeta, luchó contra viento y marea por alcanzar sus sueños, la dictadura militar en El Salvador lo obligó a exiliarse por más de 25 años, pero a través de sus letras mantuvo una conexión entrañable con su tierra, hoy el Estado salvadoreño ha comenzado a retribuirle un homenaje a uno de los grandes de la generación comprometida, Roberto Armijo, concluyó Ana María Echeverría, esposa del escritor.

Las palabras de Ana María se dieron recientemente en la cuarta, de una serie de presentaciones de los libros: “Cuando se enciendan las lámparas”, “El Asma de Leviatán”, y “Aventura hacia un país perdido”, que han sido editados a través de la Dirección de Publicación e Impresos.

Mario Noel Rodriguez, director de la DPI, destacó la importancia de esta edición, que es el inicio de una serie de ediciones de la obra de Armijo. Además se mostró optimista por la recepción del público ante estas tres obras, que ya se presentaron en Chalatenango, tierra natal del autor; el Museo Nacional; el Museo de la Universidad Tecnológico, entre otros espacios para que los salvadoreños tengan contacto con la obra de Armijo.

“Es un trabajo muy lindo que ha hecho la DPI”, agradeció Echeverría, quien reiteró que el mayor sueño de Armijo era que el Estado publicara sus libros, lo cual se ha comenzado a materializar. “Yo quería que estos libros fueran publicados en El Salvador, y una editorial en España me los había pedido…pero yo decía, quiero que salgan publicados por el Estado”, remarcó.

El poeta Roberto Armijo, nació en Chalatenango, en 1937 y murió en París, Francia en 1997, perteneció al Círculo Literario Universitario, junto a Roque Dalton, Manlio Argueta, Tirso Canales y José Roberto Cea, con quienes formó parte de Generación Comprometida.

Los libros

El exilio es una constante en la obra de Roberto Armijo, cuando escuché la primera ocasión hablar de él, estaba en la universidad, y leí un par de sus poemas, a los dos años falleció en el extranjero. Volví a escuchar de él, a través de artículos periodísticos y de revistas culturales. Su obra siempre me llamó la atención, pero confieso que no había podido tener contacto con ella. Es hasta este mes de septiembre de 2019 cuando tengo acceso a estos libros, reeditados por la DPI: “Cuando se enciendan las lámparas”, “El Asma de Leviatán”, y “Aventura hacia un país perdido”.

Desde que conocí de la primera presentación de los libros me programé para asistir a una de las presentaciones. Así conocí a su esposa, una mujer muy amable y conocedora de la obra de su marido, con quien compartió infinidad de historias, aventuras y momentos, ya que cuando le conoció ella era estudiante universitaria, además fue corresponsal de prensa extranjera, por lo cual  las historias fueron infinitas entre ellos.

Cuando ella habla de Armijo, su mirada se remonta a esos tiempos de juventud, recordando que desde los 7 años Armijo quería ser escritor; y que a los 17 ya había ganado algunos concursos de poesía.

Uno de los libros que más me ha impactado, por su naturalidad, y me permitió una ligera lectura, y sobre todo me conectó con elementos y situaciones propios de nuestra campaña salvadoreña, sin dejar de lado la crítica al régimen, a los atropellos del explotador, la represión de los cuerpos de seguridad del pasado, es “El Asma de Leviatán”.

“Es una novela que recoge su infancia en Chalatenango”, resume a la perfección Echeverría. Y remarcó que, “en esta novela, él captura ese terruño perdido, por el que él siempre añoró en todos los años en París, él tenía siempre esa nostalgia lírica, poética; pero también de colores, de sabores, de los mercados, de los pájaros, del Torogóz, de las flores, de la naturaleza que lo rodeaba…(es) un viaje inconsciente y colectivo del pueblo salvadoreño”.

“Aventuras en el país perdido”, es el segundo de los libros que están presentándose en el país, “es una colección de ensayos que publicó Roberto en la revista Cultura, que comenzó desde muy joven”, recuerda Echeverría.

“Él soñaba y quería ser escritor, y lo logró, pese a las dificultades que encontró…había una lucha diaria contra viento y mares…y eso en el libro se refleja, lo que era Roberto en su conocimiento de la literatura universal, de la filosofía universal. Es un libro de ensayos, yo me he propuesto releerlos porque de verdad garantizan una educación”, añadió.

Un tercer libro publicado, y que hoy puede ser disfrutado por las nuevas y pasadas generaciones, es la poesía de Armijo, a través de los textos en “Cuando se enciendan las lámparas”.

Confieso que la poesía de Armijo, publicada en esta edición la leí de un sentón, y la digerí de forma amena. Y como lo describió Echeverría, es un libro, “es un reflejo de una parte de su poesía».

En lo personal estoy satisfecho con esta publicación, que nos permite conocer las historias, aventuras y leyendas del norte de Chalatenango, como la historia de “Siete Pañuelos” en el Alma de Leviatán; o el poema “Mundo mío/ pintado con achiote y añil / Mundo mío abrazado a multicolores insectos…”, del poemario Cuando se enciendan las lámparas. Aventuras hacia el país perdido, nos regala una serie de escritos, como sus “reflexiones de la lírica” y el estudio de la obra de grandes escritores nacionales y universales. Bien por estas publicaciones y en espera de que se logre visibilizar más la obra de Armijo.

Tardanza y desesperación en desfile estudiantil

16 Sep

Los instrumentos bajo el sol, ante la larga espera.

Redacción

Desorganización y tardanza prevaleció en el desfile estudiantil de este 15 de septiembre en San Salvador. Estudiantes de diversos centros educativos esperaron bajo el sol e incomodidad el inicio del tradicional desfile en conmemoración al 198 aniversario de la Independencia Centroamericana. El desfile estudiantil arrancó cerca del mediodía de este domingo.

Los estudiantes fueron citados al bulevar Constitución al norte de la capital, para ordenarles de acuerdo a cada uno de los 14 departamentos del país. Los estudiantes llegaron puntuales a la cita en los respectivos centros educativos, y llegaron en transporte asignado para la jornada. A las 8 la mayoría ya estaban formados desde la zona del Divino Salvador del Mundo, y sobre todo el Constitución.

Larga espera

La espera se amortiguó en las primeras horas con demostraciones, bailes, interpretaciones de las bandas de paz. A las 10 de la mañana la desesperación se veía y el cansancio de estar de pie  algunos y bajo el intenso sol, comenzó a cobrar fuerza.

Algunos docentes  mostraron malestar, y lamentaron la organización porque nadie les informaba, y el tiempo transcurría paso a paso. Mientras tanto abajo del Salvador del Mundo, ya sobre la Alameda Franklin Delano Roosevelt, el desfile militar y policía entretenía a los miles de personas que llegaron a ver el recorrido de la marcha militar, y las distintas unidades de la Fuerza Armada.

La queja aumentaba entre los estudiantes que contaban las 11 de la mañana, y el desfile no daba signos de comenzar. Este año el desfile no llegó al Estadio “Mágico González”, sino hasta la fachada del Parque Cuscatlán, donde aguardaban cientos de personas, frente a la tarima presidencial y los organizadores de la jornada.

El colorido fue admirado por los asistentes, pese a la espera.

El desfile partido al filo de 12 del mediodía, y se enrumbó al Salvador del Mundo, bajado por la Roosevelt. Los organizadores comenzaron a acelerar a los estudiantes para que bajaran pronto en el desfile. Muchos de los asistentes ya se habían retirado, otros aun aguardaban bajo el intenso sol de mediodía. Pese a los inconvenientes disfrutaron del tradicional desfile, colorido, y los jóvenes pudieron mostrar sus destrezas en diversas áreas.

Inauguran exposición del artista Moisés Umaña en la Biblioteca Nacional

14 Sep

Durante todo el mes de septiembre pueden apreciar los Pequeños Detalles del Centro Histórico de San Salvador

 

Por: Iván Escobar

 

Pequeños Detalles del Centro Histórico de San Salvador”, es la más reciente muestra pictórica del artista plástico Moisés Enrique Umaña, quién expone sus obras durante todo el mes de septiembre en la Biblioteca Nacional “Francisco Gavidia”, de San Salvador.

La exposición se abrió al público desde el pasado lunes 9 de septiembre, y fue inaugurada con un conversatorio en el cual Umaña, intercambió con los visitantes y público en general sobre el proceso creativo de su obra.

La muestra consta cerca de 20 piezas pintadas por el artista y que retratan una serie de anuncios comerciales, estructuras, y detalles del centro histórico de San Salvador, que en un primer momento fueron captados en fotografías por el autor, y posteriormente los traslado con su estilo propio y particular al color y la textura.

En 2017 Umaña alcanzaba uno de sus grandes sueños poder exponer en el centro capitalino, y dar a conocer todas esas imágenes que diariamente capta durante su paso por la ciudad, y visión artística.

El pintor ha realizado a la fecha cuatro exposiciones, tres de pintura y una de fotografía, la primera tuvo lugar en Frida Kafé, luego en Galería Colibrí, otra más en Café Kali, y la muestra fotográfica en Café Fulano, espacios que le han permitido al autor compartir con diversos públicos,  y a la vez poner en marcha un proceso creativo a partir del uso de la fotografía digital, el cual se combina con sus conocimientos de dibujo, pintura y visión artística de la ciudad. Ahora su obra llega a la Biblioteca Nacional.

Con la muestra el autor espera dar a los capitalinos un pedacito de la ciudad, y asegurarles que solo es necesario detenerse y ver a su alrededor para valorar la obra arquitectónica, artística y típica de la ciudad.

Don Manuel Cruz comparte con el expositor.

Los nombres de los cines más emblemáticos de la ciudad, detalles de las principales plazas del centro, así como detalles como el anuncio característico del taller de Guitarra de la 8va. Avenida Norte, en el corazón del centro, propiedad de don Manuel Cruz, son parte de la muestra. Cruz asistió a la inauguración de la exposición, y agradeció a Umaña, el visibilizar su negocio de una forma peculiar, además compartió el objetivo de aquel anunció que nació de su propia inspiración. Así coincidieron las ideas de ambos artesanos y artistas salvadoreños, que compartieron e intercambiaron un momento ameno durante la jornada.

La exposición estará abierta al público de 8 de la mañana a 4 de la tarde, de lunes a viernes en la Biblioteca Nacional, informó Cecilia Castillo responsable del área de exposición de la Biblioteca, quien resaltó la importancia del encuentro de los artistas con los públicos, y en particular el poder contar historias de la ciudad capital a través del arte.

FALENA editores al encuentro del mercado literario

1 Sep

Por: Iván Escobar

La conquista de los sueños comienzan con la materialización de los mismos, y esa es la batalla que han emprendido cuatro salvadoreños y un costarricense amantes de las letras que han salido encuentro del mercado literario con FALENA Editores. Conscientes que los retos son muchos, y enfrentando diversos obstáculos han iniciado la ruta.

Los escritores Roger Guzmán; Manuel Barrera; Edenilson Rivera; y el costarricense Melvin Aguilar; junto a la creatividad del diseñador gráfico Santiago Arnulfo Pérez, han salido al mercado salvadoreño con esta editorial independiente, la cual además de garantizar la producción de ediciones nacionales, impulsaran la creatividad, originalidad, calidad y experiencia que han almacenado sus fundadores.

El colectivo da vida a este esfuerzo que viene materializándose, y que este 31 de agosto de 2019 hizo la presentación del primer producto literario: “QUIROMANCIA”, del escritor y poeta salvadoreño Álvaro Darío Lara.

“El proyecto comenzó hace unos tres o cinco años más o menos, como una idea ambigua con el compañero Edenilson, con el paso del tiempo contactamos a otras personas, como Roger Guzmán, y hace un año y medio contactamos con Manuel Barrera, hablamos de posibilidades de títulos, de libros, pero aún faltaba dar un paso fuerte para llevarlo a cabo. Manuel coincide con Melvin en un festival de poesía, luego nos lo presenta e inmediatamente hicimos clic. Ese encuentro nos potencia”, recuerda Santiago Arnulfo.

Mevil Aguilar, Santiago Arnulfo Pérez y Manuel Barrera, parte del equipo fundador de FALENA Editores.

Una de las cualidades de FALENA, es la cercanía con autores, con la edición literaria, con la producción, amistad con escritores, es decir, un conocimiento variado y amplio del mundo de las letras, que llega a materializarse con la obra del escritor Darío Lara, un reto que es grande pero les ha permitido comenzar con el pie derecho.

Los fundadores de la editorial saben que el mercado salvadoreño no es fácil de conquistar, no hay una cultura de lectura y el factor económico es una limitante, pero coinciden en que por eso no se están fijando como meta vender cantidad de obras, sino  calidad y profesionalismo.

Advierten que pueden en un comienzo recibir muchas ofertas para editar obras de artistas locales, o maquetación completa de sus textos, pero no quieren correr y dicen que están dispuestos a editar de uno a dos libros en este primer año, para garantizar la calidad que quieren ofrecer.

“A mí me invitan al proyecto, y llego con el interés de aportar. Entiendo que todo proyecto editorial, aquí y en cualquier parte del mundo, es una Quijotada. Fabricar libros, producirlos y editarlos es complicado”, opina Aguilar.

Quien añade que el nombre FALENA, no es casual, y de hecho sus fundadores explican que éste proviene del nombre de una mariposa de la familia de las polillas, y se retoma su nombre a partir del proceso de evolución de este insecto, el cual sufre una serie cambios que le permite sobrevivir en el ambiente.

“Por eso se llama FALENA editores, en eso vamos a coincidir, no se trata de una fábrica de libros, editor lo vemos desde otro enfoque, ser una plataforma que le permita a un autor llevar un producto muy afinado para que llegue una obra de alta calidad al público”, enfatiza Aguilar.

Por su parte Manuel Barrera, escritor salvadoreño y ex miembro del taller literario Xibalbá, puntualiza que al iniciar este esfuerzo, se tiene en cuenta que los retos son muchos, pero el compromiso es “ser serios, conectarse con el escritor y hacerle ese proceso de edición y curaduría a la obra, para que el producto de FALENA, sea de calidad, porque hay un público de calidad…y queremos enseñar en el quehacer literario y editorial que estos proyectos se hacen desde una perspectiva profesional”.

QUIROMANCIA el primero producto literario de FALENA.

 ¿FALENA?

FALENA viene del nombre de una mariposa, y es un nombre que se lo puso el Edenilson Rivera, luego de la búsqueda para nombrar la editorial, comenta Pérez. Y añaden que en próximos proyectos literarios las portadas quieren ilustrarlas con obras de artistas nacionales, pinturas, imágenes u obras, para proyectar el arte local.

El proyecto que está en desarrollo, ya ha dado un primer fruto. Todo aquel interesado en conocerlo e interés de edición, pueden contactarlos a través de redes sociales, invitan sus fundadores.

Darío Lara presentó su libro

Las instalaciones del Museo y Biblioteca “Luis Alfaro Durán”, ex Banco Central de Reserva (BCR), en el corazón de San Salvador, fue el lugar en el que este sábado 31 de agosto, el escritor salvadoreño Álvaro Darío Lara, presentó su libro: “QUIROMANCIA”, primer producto literario de FALENA.

El escritor Álvaro Darío Lara durante la presentación QUIROMANCIA, al fondo Edenilson Rivera, de FALENA Editores.

Con un lleno total, y la presencia de reconocidos autores nacionales, docentes, periodistas, artistas, y público en general se llevó a cabo la presentación de esta obra, que además puede ser adquirida por todo aquel interesado.

Los organizadores de la jornada se mostraron satisfechos, y agradecieron la confianza del escritor Darío Lara para trabajar este libro, así como la presencia de las personas que disfrutar una tarde cultural en el centro histórico de la ciudad.